Ecología con apellidos

Arte con bolsas de plástico reusadas

Aunque muchos compartimos la idea de cuidar la Naturaleza, defender el medio ambiente, evitar la contaminación ambiental y propiciamos acciones directas -en mi caso, muy domésticas-... con el tiempo, me percaté que no todos lo hacemos por las mismas razones... Y en mis indagaciones y encuentros, suelo notar que hay unas sutiles diferencias que no deberían desunirnos... pero que determinan las metas que perseguimos.

Eco-derrotistas: Si crees que el tema del cuidado por el medio ambiente, mantener el equilibrio de los ecosistemas interdependientes y separar la basura es algo "sólo" para locos, fanáticos o ingenuos. Si crees que haga lo que se haga, igual se van a derretir los polos, el agua del oceano inundará los continentes y el fin es inminente... Sí, eres un seguidor nato de la ecología seudo-cientificista.

Eco-políticos: Si crees que el color verde "pega" y "vende"; si eres de los que piensan que las promesas de cuidar las emisiones de hidrocarburos tienen una relación con aumentar los subsidios de la gasolina; si crees a los que promocionan un banco, una escuela o ¡un partido político! con el tema "verde", sin duda, aunque no lo sepas, eres un seguidor de un slogan con bonito color pero cero contenido.

Eco-arcoiris: Si admiras a los Guerreros del Arcoiris (Rainbow Warriors), te suena idílico el proyecto combativo de la agrupación Paz-Verde (Green Peace) y, como ellos, crees que todo el daño que sufre el planeta es acción de las ambiciones desmedidas de los humanos que han sobreexplotado a la Naturaleza... que defienden con acciones violentas -o de resistencia civil- la vida de los animales en extinción o se oponen a la tala indiscriminada de árboles o al uso de petróleo, y son además, fieros librepensadores que apoyan a como dé lugar el aborto (¿para qué más humanos que deterioren el medio ambiente?)... Sí, adivinaste, eres un seguidor de la ecología profunda.

E-corresponsables: Si, como muchas personas a las que conozco, te inspira cuidar el medio ambiente como parte de la Creación de Dios. Si crees que el ser humano tiene el derecho a usar para su beneficio y sobrevivencia lo que el reino animal y vegetal nos ofrece, pero reconces tu DEBER de administrar la obra de Dios... Si, como yo, piensas que la huella de Dios en el hombre está en la capacidad infinita de crear soluciones creativas en el "aquí y ahora" y también, diseñar proyectos que benefician a las comunidades más desprotegidas por el evidente abuso de unos o por la evidente ignorancia de otros, con espíritu solidario... de paciencia... de caridad en acciones concretas constantes. Y sobre todo, con una enorme ESPERANZA y FE en que sí vale la pena hacer algo, por amor a lo que Dios nos regaló...entonces, estamos en el mismo barco de la ecología responsable, con perspectiva humanista.