Separar para ayudar

Antonia, a sus 65 años, sobrevive con lo que puede vender para reciclar

Antonia tiene 65 años. Se encarga de alimentar a sus 4 nietos. No tiene seguro popular. Nada de nada. Ni acta de nacimiento. Sólo algo de salud.

Y una contagiosa voluntad por aprovechar lo que aún sirve y que obtiene revisando las bolsas de basura...

Un cable de tv puede reusarse para colgar ropa

Todos los días camina desde su barrio conurbado a otro residencial, y va llenando bolsas y bolsitas con lo que encuentra.

Me cuenta que con lo que vende de PET, latas y cartón o lo que sea, saca uno 35 pesos (3 dólares) cada día.
 




Martín no se apena de pepenar 

Sí. La basura de unos ayuda a otros. Martín, a sus 50 años, también recorre las calles de mi vecindario.

Con mucho cuidado, abre las bolsas de basura. Inspecciona como un verdadero experto. Saca varias botellas de PET. Algunas latas de refresco, las pisa y las mete en un gran bolso de tela que encontró en otra calle.

-Creo que no hay gente mala, dice. Más bien, es gente que no sabe que a nosotros nos sirve lo que a ellos no les sirve. Pero también, hay mucha gente buena, que nos deja hasta recién lavada y planchada la ropa que ya no necesita. También, he encontrado aparatos de radio o licuadoras que aún funcionan, y las dejaron en una caja aparte.



Martín trabaja pepenando camino a su trabajo de albañil. Los días que alcanza, se va hasta una alejada zona de la mega ciudad de México donde -asegura- le dan mejor precio por lo que logró acopiar. El kilo de PET, por ejemplo, está a 4 pesos (0.3 dólares aprox), y como hace mucho bulto... pues poco a poco junta el mínimo para al menos, sacar para el boleto de autobus.



PET, latas y cartón es lo más fácil de llevar

IDEA SIMPLE. A veces, el tema de las acciones domésticas que ayuden a limpiar nuestro Medio Ambiente parece que no dan resultados.
Uno se cansa de separar y ver con impotencia, como los señores de la basura tiran todo en el camión. Aunque se les advierta que separó por Orgánico, Inórganico y Reciclables o Reusables.

En estas dos conversaciones en la calle, me di cuenta de que a falta de puntos verdes (espacios urbanos donde se acopia la separación de PET, vidrio, cartón, latas, etc. para destinarse a las empresas recicladoras y el monto que se reúne, se va a diferentes organizaciones sociales) vale la pena seguir y seguir y seguir separando.

Mi madre, cuando nos quejábamos de algo, nos solía repetir un breve verso.
Érase un mendigo que se lamentaba: Ay de mí, pobre de mí, que tengo que vivir de lo que dejan quienes tienen comida y vestido en abundancia. Ay de mí, que tengo que buscar en la basura lo qu eme sirve... Al mirar atrás, vió como otro mendigo, sin hablar, recogía lo que él iba descartando...
 
Cuando empecé este blog, escribí sobre la importancia de SEPARAR. Cuatro años después, sigo convencida de lo mismo.

Los invito a releer Qué lata separar la basura.  http://ondasalmon.blogspot.mx/2010/11/que-lata-separar-la-basura.html